Observe atentamente esta foto:
Está claro que se trata de una habitación doblada, pues no tiene cabecero con luz, y unos bonitos tubos de color blanco y amarillo adornan la estancia...
Observe cómo entra la luz sobre la cama y cómo se proyecta la sobra en la pared. La luz entra con fuerza y la cortina/estore da la adecuada protección al paciente..., o eso parece, porque fíjese ahora:
Pues si, la cortina/estore ya no está. Se estropeó hace más de una semana... A algunos esta imagen nos recuerda a nuestra añorada Residencia Cantabria... Estos ambientes "chill-out" o playeros eran muy propios en "la Resi".
Pero, claro, esto es la Fase 3 de un hospital nuevo. Un hospital que se vende a sí mismo como hospital de referencia, un hospital que habla con soltura de "calidad asistencial".
Pregunta: ¿qué calidad asistencial recibe un paciente sentado en ese sillón o tumbado en la cama, si no dispone del estore que le proteja del sol?. Entra ahora el concepto "hospital de referencia": somos el hospital con los recursos más creativos de todo el país y al menor costo posible.
Solución a este esperpento: Antes de poner el estore hay que pintar tres centímetros cuadrados (donde queda la marca del enganche del anterior estore), pero no se puede pintar mientras la habitación esté ocupada.
Continuará...
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