La Auditoria del Gobierno

Este fin de semana hemos podido conocer, a través de los medios de comunicación, el resultado de la auditoria que ha solicitado el Gobierno de Cantabria sobre las obras de la tercera fase de Valdecilla:



En estos artículos podemos encontrar la preocupación de la Consejería y los políticos por el contrato público-privado, como si ese fuera el único problema que existe, cuando el primer problema del hospital, que, además no tiene solución, es su diseño. A algunos nos gustaría saber quién permitió que el hospital tuviera el diseño que tienen las tres torres.

Nos dicen también que hay "ventanas sin barandilla", pero no dicen nada de las ventanas cerradas de un edificio "inteligentemente energético". Cuando en el hospital suceden cosas como vómitos, sangrados, y otras emisiones de fluidos... no se arregla todo con la presencia de la limpiadora, porque el suelo o la pared quedarán limpios, pero en el ambiente se respira salud a raudales... Ni que decir tiene cuando un paciente o familiar sufre un ataque de ansiedad  o experimenta sensación de ahogo y pide, desencajado, ¡ABRE  LA VENTANA, NECESITO AIRE!. Pues, lo sentimos, pero la ventana no se abre. Los primeros quedarán con el aroma y los segundos pueden bajar a la calle a coger aire...

Añaden en la auditoria que en la planta -4 no se terminó el suelo y está intransitable. Disponen ustedes de una foto de una zona de dicha planta (en la pestaña "Cuando dicen que no hay espacio"), y también disponen de otro par de fotos del mismo nivel de suelo pero en la zona de los pabellones (pestaña "Lo que la gente no ve"). Comparen ustedes  lo transitable o intransitable de las zonas: Los bajos de los pabellones son un continuo goteo de agua de las cañerías o de lo que sea, junto a uno de los dispensadores de uniformes, bajo la urgencia, siempre hay contenedores recogiendo agua... y por allí transitamos todos los días los trabajadores, pero eso no va a aparecer en ninguna auditoria.

Por último señala otro dato (podríamos señalar más, pero no merece la pena). Según la Consejera y Vicepresidenta, la auditoria indica que las puertas corta-fuegos se han colocado en el sentido inverso al de evacuación.
Pues mire, está bien saberlo, porque los trabajadores, en 16 años y después de la tragedia sufrida en noviembre del 99, no hemos recibido ni una sola información sobre planes de evacuación, manejo de extitores o mangueras... NADA DE NADA. Así que si algún día hay un incidente, saber cuál es la dirección de evacuación será, cuando menos, un poco útil.

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